El suelo es un punto importante para el cultivo de la caña de azúcar, siendo el medio natural que proporciona agua y nutrientes para su desarrollo. Sin embargo, la caña de azúcar no necesita ningún tipo específico de suelo, puede ser cultivada en diversos tipos (arenosos, franco-arcillosos y arcillosos).
En cuanto al pH debe de encontrarse entre los 5.5 y los 8 para un buen desarrollo, dando problemas de clorosis en suelos calizos.
Para el correcto crecimiento de la caña de azúcar, es necesario contar con buenas condiciones ambientales. Las temperaturas mínimas que soporta son de 14 a 16 ºC, situándose su óptimo para el crecimiento alrededor de los 30ºC.
Los fertilizantes líquidos de Grupo Iñesta son de origen vegetal, y se aplican disueltos en agua, consiguiendo una rápida acción y absorción por parte de la planta.
Cuentan con una serie de ventajas:
Fertilizar significa proporcionar elementos nutrientes a las plantas. Por eso en Grupo Iñesta, te ayudamos a cubrir esta necesidad para que tu cultivo alcance altos rendimientos.
Los nutrientes principales para la fertilización de caña de azúcar son el nitrógeno, el fósforo y el potasio. Aunque no podemos olvidarnos de sus micronutrientes, como son el hierro, cobre… Son necesarios para lograr un buen desarrollo.
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