El abono para sandías suele incluir desde la prefloración hasta 15 días antes del corte. Consumir una deliciosa y jugosa sandía en verano es uno de los placeres de la vida. Para conseguirlo, es importante saber cómo debemos abonar las sandías, ya que si no tiene los nutrientes suficientes su producción podría ser deficiente y su sabor y textura no serán los más idóneos.
Como muchas otras plantas su nutrición requiere nitrógeno, fósforo y potasio, pero también es importante el calcio. Existen otros elementos que ejercen un papel importante en todo el proceso de crecimiento y desarrollo de las sandías, como son el magnesio, el hierro, el manganeso , el boro, el zinc, el cobre, el molibdeno y el cloro. Cada uno de estos elementos tiene una función específica para el desarrollo de la planta.
Incluye los abonos y fertilizantes para sandías de Grupo Iñesta en tu plan de abonado para obtener todo su potencial y lograr frutos de mayor calidad y tamaño.
Para mejorar tus resultados, te proponemos los siguientes productos de abono para sandías:
Lombrico® MOL 75 | Materia orgánica, para preparar la tierra |
Nobrico® ENRAIZANTE | Para el desarrollo de las raíces |
Aminolom® PROFRUIT | Para mejorar el sabor, el olor, la textura y el color |
Aminolom® VITAMIN | Para llenar de energía y vitalidad el cultivo, mejorando notablemente su crecimiento |
Aminolom® CALCIO | El calcio activa y regula la división celular, influye en la especialización de los órganos celulares, participa en el metabolismo de los hidratos de carbono y tiene un importante papel osmorregulador |
Contacta con nosotros y te asesoramos sobre qué abono es mejor para que este cultivo dé su máximo rendimiento.
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Los productos de Grupo Iñesta son complementarios de la fertilización básica (NPK) • No poseen plazo de seguridad y no generan residuos. • Los programas de aplicaciones pueden variar en función de las condiciones del lugar, cultivo o climatología. Contacte con nuestro departamento agronómico para una recomendación personalizada. • Todos nuestros bioestimulantes e inductores de defensa provienen de extractos vegetales.